martes, 8 de diciembre de 2009

Directo a la cajita de DVD: "Dark Blue" con Kurt Russell

Los demonios

"El rostro oscuro de la ley" (Dark Blue) de Ron Shelton con Kurt Russell, Brendan Gleeson, Scott Speedman y Ving Rhames.

En un caso extraño, este film, del 2003, llega con seis años de retraso y más extraño aún es que alguna vez se exhibió por única vez en el, tristemente añorado, cine América con motivo de un preestreno organizado por una marca de cigarrillos. La razón oculta de este letargo en la sálida del film puede deberse a su terrible visión negativa, lúgubre y deseperanzadora sobre un sistema policial, del que la trama se ocupa en mostrar que no hay buenos, sino distintas clases y grados de villanos.
James Ellroy y el guionista David Ayer son los creadores de este oscuro episodio sobre una de las policías más cuestionadas del mundo, el primero escribió la historia de "Los Angeles: Al desnudo" y el segundo fue el guionista de "Día de entrenamiento" y dirigió además la reciente "Reyes de la calle" del 2008. Cada una de estas películas involucra, en diferentes hechos, a detectives y policías de Los Angeles en casos y situaciones espinosas. La diferencia en "Dark Blue" está en que se situa en el año 1992, en pleno calor del tristemente célebre juicio de los policías que apalearon a Rodney King.
El film comienza con el novato Booby Keough (Scott Speedman) apañado por su compañero, el veterano sargento Eldon Perry (Kurt Russell) ante una audiencia por un tiroteo turbulento con el saldo de un sospechoso muerto. A estos dos integrantes de un escuadrón especial los alienta, los fomenta y los protege el jefe Van De Meer (Brendan Gleeson), no hace falta ser un espectador del género para darse cuenta de que Perry es el que mató al sospechoso y armó toda la historia para salvar a su inexperto compañero, tampoco es necesario que pase una gran cantidad de metraje para deducir las transas y la corrupción emanada por Van de Meer. Precisamente uno de estos turbios negocios de Van de Meer desencadena el destape de la olla hirviendo de este escuadrón especial, una masacre en un supermercado perpretrado por dos ex - convictos para robar una caja fuerte, un golpe que debió salir limpio.
Ron Shelton, director de films "deportivos" como "Los blancos no saben saltar", entre otras, se hace cargo de una historia oscura y teñida por un contexto candente para la ciudad de Los Angeles por el juicio del rapero King, hecho que en algunos pasajes juega una acción dramática preponderante. Shelton, quiza por su falta de experiencia en el genero, lava y estiliza cierta violencia que exigía una cierta explicitación como en "Día de entrenamiento", con la utilización de recursos como el fuera de campo, asesinatos desde la subjetiva de una cámara de seguridad, etc. Sin embargo, pareciera que Shelton esconde su mejor carta para un final cargado de acción retro y de un panorama casi post apocaliptico desatado luego del veredicto del caso King.
Las relaciones entre los personajes fluctúan entre ciertos agujeros dramáticos y fortalezas de oficio, especialmente de Russell, Gleeson y Rhames, quien encarna a la esperanza (inevitable) de una policía ideal, utópica y simplemente imposible. Los cuestionamientos morales aparacen de la nada, como si a los personajes los empujaran los tiempos cinematográficos. El hecho que moviliza a Perry para tener su pequeño acto de redención es debil y sugiere más bien una abducción al personaje, que un cambio verosimil de la trama. La experiencia y la cintura de Shelton hacen salvar estas asperezas y ofrecen un entretenimento para el habitué del género y del policial seco sin grandes enmarañamientos. No obstante, Russell parece a priori, una elección peculiar para el policial oscuro, pero el actor de tantos films subvalorados como por ej. "Escape de Nueva York", sale airoso con una composición más que digna de un personaje derrapado, no sólo por su vida profesional sino también personal, que vive sus últimas horas de impunidad.
Esta terrible policía angelina retratada en este film se ve en el medio de una puesta en crisis de un sistema fallido y una revuelta social por el veredicto que dejó libre a los oficiales que atacaron a King, "Dark blue" a pesar de ser un policial duro, seco y sin laberintos deja algunos claros visibles que empañan el negro de la historia. Aunque, por cierto, todo esto último (nos) importe poco a los amantes y sedientos de policiales como es este "Dark blue".


Trailer "Dark blue" (2003)


2 comentarios:

Shine off dijo...

La verdad que es destacable eso, casi tanto como que la gente no se muera en estos shows!
Es cierto lo de Juanse, hubo un cantito de "pomeeeeelo, pomeeeeelo", o no lo escuchó o se hizo el boludo.
Suena interesante la película, cuando me canse de las películas de terror de los 80 que estoy bajando (hoy toca Antropophagus), me la taringueo. Abrazo!

tomás. dijo...

El estadio casi colmado fue la señal de la obra maestra que se estaba presenciando, la de un genio, un artista que construyó una carrera intachable; brindando un show que pienso superó las espectativas de todos.

[me quedé con el verbo taringuear que pone el amigo Pato...]

un abrazo grande.